Técnica que consiste en batir las claras de huevo con un batidor de mano o eléctrico con movimientos circulares bruscos para aumentar el volumen de las claras y obtenerse una espuma blanca firme.
Las claras a punto de nieve se utilizan en la elaboración de postres para preparar merengues, incorporarse a mezclas para tortas o en la elaboración de platos salados como las tortillas, el cuajado venezolano, entre otros. Para saber el punto perfecto de las claras montadas se debe introducir un palillo de altura en forma vertical y esté debe mantenerse en esa posición.