Alimento cárnico procedente del cerdo, a pesar de ser un alimento prohibido en algunas religiones, es uno de los más consumidos a nivel mundial, siendo el ingrediente principal para la elaboración de diversos platos preparados de muchas maneras cómo horneado, asado, en guiso o frito.
Su carne es una fuente de proteínas esencial para nuestro organismo por ser de carne blanca, más saludable que la carne de res, cabe destacar que para su cocción es necesario mantenerla congelada y luego cocinarse en agua hirviendo directo del freezer para matar las bacterias Taenia solium y Trichinella spiralis, presentes en algunos cerdos.